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Emma meets Tancredi in Florence, embarking on a love affair with the intoxicating cosmos he represents: endless days in the gauzy Florentine hills or the sun-blanched beaches in Maremma. They become engaged. Soon, however, Emma becomes caught in family politics, learning what is expected of a woman in Florentine high society. The same beauty that overwhelmed Emma reveals itself as superficial and suffocates her. Noble Earth is a study of ennui and female repression within a world rarely seen onscreen — Italy’s hermetic nobility. On the occasion of the screening of Noble Earth at the Berlin Visionär Film Festival 2018 past spring, I had the opportunity to briefly interview Ursula Grisham, director of the film, which was shot mostly in Florence.
Paco Neumann: The lighting used in your movie is quite dark. However, Tuscany light is commonly praised by artists, even Frances Mayes dedicated an ode to it in her book Under the Tuscan Sun … I assume you wanted to show a shady atmosphere and bleak characters, far from the idealism that Americans have about Florence and Tuscany …
Ursula Grisham: When working with my cinematographer Kasper Wind in pre-production — and also my Florentine producer Lorenzo Fiuzzi long before that — we decided we did not want to make a postcard movie about Florence. The light is certainly beautiful, soft and gauzy, and while our idea was capturing that, we also decided to avoid certain clichés about the city. What was more interesting to us than Florence’s beauty “per se”, it was its decadence — both cultural and aesthetic — and beauty is only one aspect of that.
PN: The film shows a snobbish, racist, and nepotistic society, idle young people free of responsibilities, where the family comes first, «la mamma» above all things and then, friends in the second position — which I think is quite true when it comes to Italians … Is your film based on personal experiences?
UG: While not biographical, the film is based on my experiences in Italy and, in particular, in this echelon of Italian society. It was a perspective that evolved over time and throughout conversations I had with many members of the youngest generation, who are all seeking a way forward, a way to understand their past and how to forge a new identity for themselves.
It is interesting that you mention the figure of «la mamma» because the female influence was one of the most fascinating aspects of this culture for me. It is not a traditional matriarchy but rather one, in which behind the scenes, women control the quotidian reality of all things and ultimately the culture’s destiny. To explore femininity and the complex mechanism of female repression — in which women also play a part — within this context was a very compelling point of inquiry.
PN: What I do like most about your film is that you relied on engaging literary resources: it shows more than it tells, leaving a lot of room for imagination and interpretation. I bet you have a background in literature …
UG: I do have a background in literature. In literature, and most forms of art, I prefer works that privilege reality — behavior, landscapes, passing glances — rather than exposition. So what is reality? I recall reading an interview with one of my favorite contemporary directors, the Norwegian filmmaker Joachim Trier after he made the exquisite Oslo, August 31st. The interviewer asked him quite the same question, and he responded by describing those scenes wherein the two characters lay all their cards on the table, talk about their feelings, how they love each other but cannot be together, etc. and he said something along the lines of «I do not make movies like that, because that is not real life. In real life, people do not talk about their feelings. They hide them.» That has been a kind of lodestar when I think about storytelling.
PN: I believe that there is subtle parallelism between your film and Bernardo Bertolucci’s Stealing Beauty, although yours is the antithesis of Bertolucci’s one: American girl who travels in summer to Tuscany, two brothers of a rich family, dead parents, dark secrets, a love story … Have you seen this movie? Did it influence your creative process (maybe in a negative way) in Noble Earth?
UG: I am ashamed to say I have not seen Stealing Beauty. But I will now!
PN: Will your movie be screened or distributed in Italy, Tuscany, Florence …?
UG: We would love to bring the film to Florence. We have not yet signed a distribution deal in Italy, but are very close …
Noble Earth, un film ambientado en Florencia que critica la alta sociedad florentina
Emma conoce a Tancredi en Florencia y se embarca en una historia de amor en el embriagador cosmos que él representa: días interminables en las colinas florentinas o en las playas de la Maremma. Se comprometen. Pronto, sin embargo, Emma se ve atrapada en normas y reglas familiares, mientras la van aleccionando sobre lo que se espera de una mujer en la alta sociedad florentina. La misma belleza que había abrumado a Emma en un primer momento se revela ahora como superficial y sofocante. Noble Earth es un estudio sobre el hastío y la represión femenina en un mundo que rara vez se ve proyectado en pantalla: la nobleza hermética de Italia. Con motivo de la proyección de Noble Earth en el Berlin Visionär Film Festival 2018 la primavera pasada, tuve la oportunidad de entrevistar brevemente a Ursula Grisham, directora de la película, rodada mayoritariamente en Florencia.
Paco Neumann: La iluminación que predomina en tu película tiende a ser bastante oscura. Sin embargo, la luz de Toscana es y ha sido alabada por artistas, incluso Frances Mayes le dedicó una oda en su libro Bajo el sol de Toscana... Supongo que querías mostrar una atmósfera turbia y personajes sombríos, lejos del idealismo que los estadounidenses tienen sobre Florencia y Toscana…
Ursula Grisham: Cuando trabajaba con mi director de fotografía Kasper Wind en preproducción, y mucho antes también con mi productor florentino Lorenzo Fiuzzi, decidimos que no queríamos hacer una película-postal sobre Florencia. La luz es ciertamente hermosa, suave y vaporosa. Nuestra idea fue captar precisamente eso, aunque también decidimos evitar ciertos clichés sobre la ciudad. Más que la belleza de Florencia «per se», para nosotros era mucho más interesante su decadencia, tanto cultural como estética, y la belleza es solo un aspecto de ello.
PN: El film muestra una sociedad esnob, racista y nepotista, gente joven ociosa y libre de responsabilidades, donde la familia es lo primero, «la mamma» sobre todas las cosas y a continuación los amigos en segundo lugar, lo que creo que es bastante realista en cuanto respecta a los italianos… ¿Está basado el film en experiencias personales?
UG: Aunque no es biográfica, la película se basa en mis experiencias en Italia y, en particular, en ese estrato de la sociedad italiana. Se trataba de una perspectiva que fue evolucionando con el tiempo, sobre todo durante las conversaciones que mantuve con muchos miembros de la generación más joven, que intentan buscar un camino a seguir, una forma de comprender su pasado y cómo forjarse una nueva identidad.
Es interesante que menciones la figura de «la mamma» porque la influencia femenina fue uno de los aspectos de esta cultura que más me fascinó. No es un matriarcado tradicional, sino más bien uno en el que las mujeres controlan, entre bastidores, la realidad cotidiana de todas las cosas y, en última instancia, el destino de la cultura. Dentro de este contexto, explorar la feminidad y el complejo mecanismo de represión femenina, en el cual las mujeres también juegan un papel, fue un punto de investigación muy convincente.
PN: Lo que más me gustó de Noble Earth es que echa mano de excelentes recursos literarios: muestra más de lo que dice, dejando mucho espacio a la imaginación y la interpretación. Apuesto a que tienes formación en literatura…
UG: Sí, la tengo. En literatura, y en la mayoría de las disciplinas artísticas, prefiero las obras que privilegian la realidad (comportamiento, paisajes, miradas fugaces) en lugar de la exposición. Pero ¿qué es la realidad? Recuerdo haber leído una entrevista que le hicieron a uno de mis directores contemporáneos favoritos, el cineasta noruego Joachim Trier, después de haber rodado el exquisito film Oslo, el 31 de agosto. El entrevistador le hizo la misma pregunta, y él respondió describiendo aquellas escenas en las que dos personajes ponen todas sus cartas encima de la mesa, hablan sobre sus sentimientos, cómo se aman pero no pueden estar juntos, etc. Y Trier dijo algo así como: «No hago películas así, porque la vida real no es así. En la vida real, la gente no habla de sus sentimientos; los esconden». Esa ha sido una especie de estrella polar que ha guiado mi manera de narrar historias.
PN: Desde mi punto de vista, existe un sutil paralelismo entre tu película y Belleza robada de Bernardo Bertolucci, aunque la tuya es más bien la antítesis de la de Bertolucci: una chica estadounidense que viaja en verano a Toscana, dos hermanos de una familia rica, padres muertos, oscuros secretos, una historia de amor… ¿Has visto esta película? ¿Te influyó de alguna manera en tu proceso creativo (quizás de forma negativa) cuando trabajabas en Noble Earth?
UG: Me da vergüenza decir que no he visto Belleza robada. ¡Pero te prometo que la veré!
PN: ¿Se proyectará o distribuirá tu película en Italia, Toscana, Florencia…?
UG: Nos encantaría llevar Noble Earth a Florencia. Todavía no hemos firmado un acuerdo de distribución en Italia, pero estamos muy cerca…
Noble Earth – Trailer from FILMATIQUE on Vimeo.